Baja visión

Optometría

Impulsa Tu Independencia Ocular

Si tú o un familiar tienen baja visión, aún es posible disfrutar de la vida y las aficiones.

La baja visión limita las actividades diarias y no puede ser corregida con gafas, lentes de contacto, o tratamientos médicos o quirúrgicos. Puede ser causada por patologías, malformaciones congénitas o accidentes.

Aquellos con baja visión que conservan algo de visión útil pueden aprender a usar ayudas ópticas para facilitar tareas como leer, ver televisión, coser o tomar el autobús.

TIPOS DE AYUDAS

Disponemos de ayudas ópticas como gafas especiales, filtros, lupas, telescopios, atriles, lámparas, lupas electrónicas y dispositivos no visuales. Estas soluciones están diseñadas para mejorar el contraste, reducir el deslumbramiento y facilitar tareas diarias.

La baja visión, común en personas mayores debido a patologías como degeneración macular, retinopatía diabética, cataratas, glaucoma, y miopía magna, también puede afectar a personas jóvenes tras cirugía o enfermedades oculares. Es crucial realizar revisiones anuales para adaptar las ayudas a cada necesidad.

Una adecuada ayuda para baja visión puede maximizar la visión residual, recuperando autonomía y mejorando la vida cotidiana.

¿CÓMO FUNCIONA EL SERVICIO DE BAJA VISIÓN?

  • Evaluación y prescripción: Analizamos su visión y capacidades para recomendar las ayudas ópticas o no ópticas adecuadas para alcanzar sus objetivos.
  • Entrenamiento visual: Proporcionamos ejercicios para optimizar la visión en las áreas más funcionales del ojo.
  • Uso de ayudas: Enseñamos cómo utilizar las ayudas ópticas o no ópticas para retomar actividades como leer o ver detalles en objetos cotidianos. Usted evalúa las opciones y decide cuáles usar.
  • Seguimiento y revisión: Realizamos un seguimiento para asegurar el correcto uso de las ayudas y revisamos su visión anualmente.

 

Las personas con baja visión suelen beneficiarse de un buen contraste, siendo los colores amarillo y negro los más fáciles de distinguir.